Cuando la enfermedad periodontal se detecta al inicio, los métodos de cuidado conservadores o no quirúrgicos en combinación con rutinas de higiene mejoradas pueden restaurar la salud periodontal. Si bien las limpiezas periódicas y profesionales son suficientes para mantener la salud periodontal en pacientes que no tienen enfermedad de las encías, una vez que se presenta la gingivitis, se recomiendan limpiezas más profundas y posiblemente otros métodos de atención no quirúrgicos para tratar la condición.
La Academia Americana de Periodontología enfatiza el logro de la salud periodontal por medio de los enfoques de tratamiento menos invasivos y económico para la atención. Las limpiezas más profundas, que incluyen escala y cepillado de raíz, son procedimientos no quirúrgicos que se consideran la primera línea de defensa contra la progresión de la enfermedad periodontal.
Con escala y cepillado de raíz, cualquier placa y sarro (placa dental endurecida) que se haya acumulado debajo de la línea de la encía se eliminan cuidadosamente y luego se suavizan las superficies de la raíz de los dientes. Dado que la enfermedad periodontal es una respuesta inflamatoria a la placa, el sarro y las toxinas bacterianas, simplemente eliminando mecánicamente estos agentes, se puede detener la progresión de la enfermedad de las encías. Además de eliminar la placa y el sarro con un procedimiento de escala y cepillado de raíz, los medicamentos antimicrobianos colocados debajo de la línea de las encías o los medicamentos sistémicos se pueden usar como adjuntos para reducir aún más la población bacteriana.
Si los enfoques no quirúrgicos para controlar la enfermedad periodontal no logran el resultado deseado, se puede recomendar una cirugía para detener su progresión y reparar el daño como sea posible
